POR LUIS D. SANTAMARIA
El autor es periodista- Reside en Monte Plata.
Fallaron rotundamente aquellos que queriendo confundir a los electores apostaban a una segunda vuelta en las elecciones del pasado 5 de julio, tomando como parámetro para tales afirmaciones los resultados de las encuestas pagadas y publicadas por el oficialismo.
Aquellos que apostaban a una segunda vuelta electoral lo hacían para hacerse los graciosos a la vista de los que promovían e invertían cuantiosas sumas de dinero en el candidato del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Gonzalo Castillo.
Pero lamentablemente sus predicciones fueron echadas por la borda por un pueblo que desde un principio apostaba a un cambio y no hubo forma de persuadirlo para que cambiara su intención del voto en favor del candidato del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Luis Abinader.
Conozco a analistas políticos que osaron en arriesgar su prestigio haciéndose los graciosos a la vista del oficialismo afirmando ciegamente que contra viento y marea que se produciría una segunda vuelta electoral durante los comicios del 5 de julio.
Quedaron muy mal parados porque los que así creían lo hacían pensando en que el ex presidente Leonel Fernández obtendría una votación significativa que impidiera que Luis Abinader ganara en primera vuelta y tuviera que irse a una segunda.
Todos estos vaticinios se estrellaron contra el muro del pueblo que desde un principio se había propuesto evitar una segunda vuelta votando masivamente por Luis Abinader que felizmente logró imponerse en una primera vuelta.
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